Según la Oficina Federal de Estadística (Destatis), a finales de 2020 había en Alemania 42,8 millones de viviendas en edificios residenciales y no residenciales.
Activistas anticapitalistas protestan contra la desocupación de viviendas y exigen la "socialización" de las empresas inmobiliarias. Pero lo que realmente quieren decir es "expropiación".
Es justo oponerse a la desocupación y a la especulación inmobiliaria. Pero una cierta cantidad de vacantes es necesaria: los expertos calculan que se sitúa en torno al 1-2%. En Alemania, esto afectaría a entre 400.000 y 800.000 pisos. ¿Cómo van a poder mudarse los ciudadanos si no hay pisos libres? ¿Cómo se van a reformar o renovar los pisos si no se puede alojar a los inquilinos en otro lugar? ¿Dónde deben ir las personas cuyas casas han quedado destruidas por un suceso natural, por ejemplo? ¿Qué deben hacer las parejas que esperan descendencia y necesitan un piso más grande?
Según la ley de la oferta y la demanda, los pisos vacíos abaratan los alquileres.
Actualmente, hay una escasez de más de 700.000 pisos, la gente apenas puede pagar el alquiler, la calefacción, la electricidad - pero este gobierno verde/rojo sigue propagando: Todo el mundo es bienvenido en Alemania. Cientos de miles no tienen piso propio, sino que viven en alojamientos compartidos comunales o con amigos, decenas de miles viven en la calle.
Según los cálculos oficiales, deberían construirse al menos 100.000 viviendas sociales al año. En 2022, ¡sólo se completaron 16.000!
La dramática situación del mercado de la vivienda también provoca una reducción de la movilidad. Los que aún tienen un piso asequible ahora temen mudarse. ¿Mudarse por un trabajo mejor pagado si los ingresos extra se los come un alquiler futuro más alto?
En la Parte II escribiré algo sobre la infraestructura.
Tras una redada en un gran burdel, la fiscalía de Berlín alegó una conexión con la delincuencia organizada sin pruebas reales.
Los propietarios denunciaron esta insinuación y los tribunales les dieron la razón.
Para evitar una condena del gobierno de Berlín, el tribunal propuso un trato al gobierno de la ciudad: ninguna condena a cambio de una multa de 25.000 euros para UNICEF.
¡No te creerías lo que ha pasado!
El Gobierno rechazó esta propuesta de mediación. Ahora ha sido sentenciado: Tiene que pagar 100.000 euros + 11.000 euros de intereses a los dueños del burdel. Dinero de los contribuyentes, por supuesto.
El Gobierno Federal alemán cuida bien de sus amigos. En la última legislatura, el número de funcionarios federales aumentó en 2.500 personas. En el periodo actual se añadirán otros 750 puestos.
Esto incluye a los secretarios de Estado. Con un total de 71 secretarios de Estado parlamentarios y funcionarios, el gobierno federal emplea a más que ningún gobierno anterior. Hace veinte años, bajo el Gobierno Schröder, había 48. Cada secretario de Estado parlamentario desencadena una cascada de costes adicionales: Los ingresos personales anuales, los gastos de personal de secretaría, coches oficiales y chóferes suman unos 500.000 euros anuales.
Un experto en presupuestos públicos afirma:
"Los ministerios federales no tienen necesidades objetivas de personal. Son autoridades políticas que no funcionan mejor si tienen más personal. Al contrario. Se vuelven aún más grandes, aún más jerarquías, aún más unidades que, en última instancia, no desempeñan ningún papel en la vida cotidiana. Desde ese punto de vista, es muy disfuncional".
Las últimas contrataciones
El Ministro Federal de Economía (aprox. 17.000 euros de sueldo mensual, ~ 200.000 euros al año) ha creado recientemente un nuevo puesto: su propio fotógrafo personal. Salario: 400.000 euros durante 4 años.
La Ministra de Asuntos Exteriores ha seguido su ejemplo: ha contratado a su propio maquillador por 90.000 euros al año (=360.000 euros en total).
Mi salud ha seguido deteriorándose durante el año pasado. Parte de este deterioro se debe a mi edad, por supuesto. Pero quizá también se deba a que viví bastante alocadamente en mi juventud. 😂 De todos modos, para 2022 había resuelto consultar a mi médico de cabecera sobre algunos problemas. Apenas había empezado el año y, de repente, ¡ya era diciembre! Así que había que darse prisa para no acabar el año como un fracaso.
El lunes, ayer, por fin tenía cita con mi médico de cabecera para hablar de los próximos pasos. En última instancia, quien pregunta también debe estar preparado para recibir respuestas desagradables. A veces puede ser mejor no hacer nada.
Medicos
Lo primero que voy a hacer es un análisis de sangre muy detallado a finales de enero. A continuación, se realizarán una serie de pruebas y tres citas importantes con especialistas. En febrero me harán una tomografía abdominal, luego en abril me harán una colonoscopia y en mayo por fin podré ver a un cardiólogo.
Sí, sí, en esta super-Alemania super-rica hay que esperar hasta 6 meses para ver a un especialista.
Mientras no tengo un diagnóstico exacto, no estoy realmente preocupado. Es la larga espera lo que me está cansando un poco. Y, por supuesto, la cuestión de qué terapia será necesaria al final.
Sin embargo, no soy el único con estos problemas. Los pediatras dan la voz de alarma: ¡tienen que atender a más de 140 pacientes al día en algunos casos! Eso no son ni 3 minutos por pequeño paciente (y padres nerviosos).
Medicamentos
También hay problemas considerables con los medicamentos. Más de 300 medicamentos importantes (!) no están disponibles en este momento, para otros 700 hay cuellos de botella y retrasos en el suministro.
El presidente del Colegio de Médicos ha hecho la ridícula sugerencia de que los vecinos se ayuden mutuamente con los medicamentos. Incluso llegó a sugerir que se organizaran mercadillos de medicamentos. La cumbre de su iluminación: ¡incluso los medicamentos caducados podían seguir utilizándose!
(Por cierto, estas propuestas -especialmente para los medicamentos con receta- están prohibidas por ley).
Lo sé, lo sé, en principio quería ser más diligente y terminar mi informe sobre la visita de una semana al HMC además de los textos de la academia.
Pero tras mi regreso tenía muchas otras cosas que hacer, la mayoría de ellas desgraciadamente desagradables.
Y tengo que decir que después de esa semana no estaba recuperado en absoluto, sino -al contrario- bastante agotado. Naturalmente, las múltiples conversaciones con usted me interesaron mucho, pero también me cansaron mucho. Una semana es demasiado poco.
No quiero coquetear con ello, pero es un hecho que he llegado a una edad en la que varios de mis amigos y conocidos ya han muerto. Mi salud no es especialmente buena, y cada cambio supone un esfuerzo para mí. Un viaje largo y bastante incómodo, un clima diferente, una cama diferente, ruidos diferentes, un idioma diferente, ... algún día lo experimentaréis por vosotros mismos.
Cuando me di cuenta de que a menudo reaccionaba de forma irritable ante los demás, decidí hacer un segundo viajecito.
Así que volé a Lanzarote durante una semana para experimentar sólo el sol, la playa y el sonido del mar. Esta estancia ya está llegando a su fin mañana.
Estoy seguro de que entenderás que esta vez sólo me he ocupado de mí misma. Apenas correos electrónicos o mensajes a través del Mensajero Signal. Poca televisión. Ningún contacto con extraños. Sólo yo.
Os pido a todos un poco de paciencia y os aseguro que estoy haciendo todo lo que puedo por el momento. Pero mi lista de proyectos pendientes es larga...
Vuelve a visitarme aquí en el blog y no lo olvide: ¡presione siempre primero el botón de actualizar!